Cambiar deportaciones por plan regularización

La Federación Nacional de Arroceros (Fenarroz) pidió cambiar el plan de deportaciones de migrantes por un programa de regularización de los inmigrantes que no entorpezca la producción agropecuaria, que actualmente depende de la mano de obra extranjera.

Directivos de Fenarroz plantean que el artículo 135 del código laboral, el cual establece que el 80 % del número total de los trabajadores de una empresa debe estar integrado por dominicanos y el resto puede ser de extranjeros debe modificarse porque para la agricultura la disposición “no es cumplible”.

Durante su participación como Marcelo Reyes, presidente de la Fenarroz, Iván Tió Pimentel, ex presidente, Marcos Rodríguez y Santo Paulino, dijeron que ven el tema de las deportaciones de inmigrantes, sobre todo de nacionales haitianos, con mucha preocupación.

Agregaron que la mayoría de la mano de obra del sector agropecuario es extranjera, en su mayoría de ciudadanos haitianos, por lo que se presta a confusiones cuando un productor transporta a esos trabajadores a sus predios, ya que en algunos casos son señalados como traficantes de ilegales.

Expresaron la preocupación que hay en el país por el gran número de inmigrantes ilegales procedentes de Haití a República Dominicana.

No obstante, dijeron que la realidad es que el país se han creado las condiciones, a través de programas de subsidios sociales y el recibo de remesas, para que muchos dominicanos no deseen trabajar en el campo, siendo la mano de obra haitiana la que suple la necesidad de trabajadores que tiene el sector agropecuario.

Además, de que como ocurre en otros países, las labores más rudimentarias y pesadas no son las que por general realizan la mano de obra extranjera.

Es por eso, pidieron se garantice la disponibilidad de trabajadores para cultivos sensibles como son el arroz, banana, plátano, café, habichuelas, yuca, entre otros.

Dijeron que la cantidad de trabajadores extranjeros que necesita el sector agropecuario ya se encuentra en el país, por lo que abogaron por un programa de regularización que permita identificarlos y poder ubicarlos cuando sea necesario, además de que puedan ser inscriptos en el Sistema de la Seguridad Social si califican para eso.

Sugirieron dotar de un carnet a los inmigrantes de ser necesarios, el cual debe tener un costo y que se controle a quienes hacen negocios con la deportaciones.

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