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Los churros son un clásico de la repostería española, amados por su simplicidad y delicioso sabor. Son perfectos para un desayuno o merienda, especialmente cuando se acompañan de una taza de chocolate caliente o café. En muchas regiones los churros son una tradición dominical o de feria, donde su crujiente exterior y suave interior son irresistibles. Hacer churros en casa es más fácil de lo que parece, y con esta receta rápida se pueden disfrutar frescos y calientes en pocos minutos.
Originarios de la península ibérica, han viajado por el mundo y lograron adaptarse a diferentes culturas. En América Latina son especialmente populares en países como México, donde se sirven con canela y azúcar, o rellenos de dulce de leche. Existen muchas variantes, pero la receta básica sigue siendo sencilla y se elabora con ingredientes que seguramente se cuenta en la cocina. Es una opción económica y deliciosa que siempre triunfa.
La preparación de los churros comienza con una masa simple a base de harina, agua y sal. Se calienta el agua con la sal, luego se incorpora la harina para formar una masa densa que se fríe hasta obtener ese crujido característico. Para darle un toque especial, se pueden rebozar en azúcar y canela al final.
Para esta receta de churros rápida, necesitarás aproximadamente 30 minutos en total:
- 5 minutos para preparar la masa.
- 10 minutos para calentar el aceite y formar los churros.
- 15 minutos para freírlos hasta que estén dorados.
- 1 taza de harina de trigo.
- 1 taza de agua.
- 1/2 cucharadita de sal.
- Aceite vegetal para freír (cantidad suficiente para cubrir los churros).
- Azúcar (para rebozar).
- Canela en polvo (opcional, para rebozar).
- En una olla pequeña, hervir el agua con la sal.
- Una vez que el agua esté hirviendo, retirarla del fuego y agregar la harina de golpe.
- Mezclar rápidamente con una cuchara de madera hasta que se forme una masa suave y sin grumos.
- Dejar que la masa repose unos minutos para que se enfríe un poco.
- Colocar la masa en una manga pastelera con una boquilla de estrella (o una churrera).
- Calentar el aceite en una sartén profunda a fuego medio-alto.
- Cuando el aceite esté caliente, formar los churros directamente en la sartén, cortando la masa con unas tijeras a la longitud deseada.
- Freír los churros durante 2-3 minutos por cada lado o hasta que estén dorados y crujientes.
- Retirar los churros del aceite y colocarlos sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
- Rebozar los churros en azúcar y canela mientras aún están calientes.
Esta receta rinde aproximadamente 10 churros medianos, dependiendo del tamaño de cada uno.
Cada porción de churros (1 churro) contiene aproximadamente:
- Calorías: 100
- Grasas: 6 g
- Grasas saturadas: 1 g
- Carbohidratos: 12 g
- Azúcares: 3 g
- Proteínas: 1 g
Cabe señalar que estas son estimaciones, y los valores nutricionales precisos dependen de los ingredientes específicos utilizados en la preparación y las cantidades de cada porción.
Los churros son mejores cuando se consumen frescos. Sin embargo, se pueden guardar en un recipiente hermético a temperatura ambiente por hasta un día. Para recalentarlos, es mejor hacerlo en el horno a baja temperatura para que recuperen su textura crujiente.
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Según infobae.com