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No estamos en un momento de emociones fuertes. Según los indicadores de sentimiento, no hay ni codicia extrema ni miedo extremo. Esto implica que, juzgando el volumen y la volatilidad, hay mucha apatía y desinterés. En este contexto, es muy difícil hacer pronósticos. En este momento, la incertidumbre es bastante elevada porque nadie sabe qué va a pasar con Bitcoin.
¿Subirá o bajará? ¿Romperá algún soporte o resistencia? ¿Se mantendrá en un rango lateral? Estas son las preguntas que se hacen muchos inversores y traders, pero nadie tiene una respuesta definitiva. Lo único que podemos hacer es estar atentos a las señales del mercado y actuar en consecuencia.
No hay que dejarse llevar por las emociones, ni por las noticias sensacionalistas. Hay que tener paciencia, disciplina y una estrategia definida. Hay prepararnos para lo inesperado, porque el precio de Bitcoin puede sorprendernos en cualquier momento.
En el medio plazo, todavía no sabemos si la racha alcista que nos sacó del suelo del último trimestre del año pasado fue una trampa para osos como la de 2019 o de hecho el estancamiento de ahora es una simple pausa antes de reanudar la recuperación. Pero eso no lo sabemos todavía. De hecho, nadie lo puede asegurar porque en este contexto actual de tanta incertidumbre cualquier cosa puede pasar. Son tiempos excepcionales. Y, en tiempos excepcionales, lo más sensato es esperar lo excepcional.
¿Qué significa esto? Que no podemos confiar en las predicciones ni en los análisis tradicionales. Que tenemos que estar preparados para todo tipo de escenarios, tanto positivos como negativos. Que tenemos que ser flexibles y adaptarnos a los cambios. Y que tenemos que tener un plan B por si acaso.
Más allá de lo que pensemos sobre la tendencia a medio plazo, no hay dudas de que al corto plazo la tendencia es definitivamente lateral. Y operar con una tendencia lateral es muy complicado. Una opción es hacer trading dentro del canal, que es comprar cerca del soporte después del rebote y vender cerca de la resistencia después del rechazo. Pero para hacer eso exitosamente, hay que ser un trader experimentado. El problema es que operar en tendencia lateral es apostar a probabilidades de 50-50. O sea, es como lanzar una moneda al aire. Es como un casino. Lo más sensato es operar cuando las probabilidades están a nuestro favor.
En este mercado hay muchas estrategias, pero en mi caso pienso que lo mejor es actuar después de haber identificado una tendencia clara. Esto normalmente significa máximos ascendentes y mínimos ascendentes… al menos tres veces. Eso es el caso de una tendencia alcista. Y en el caso de una tendencia bajista, máximos descendentes y mínimos descendentes. En ese caso, tenemos más de 50% de probabilidades de acertar si seguimos la dirección del mercado.
¿Cómo identificar una tendencia clara? Se puede usar herramientas como las líneas de tendencia, las medias móviles, el MACD y el RSI. Hay que observar el comportamiento del precio y los volúmenes. Hay que tener en cuenta los niveles de soporte y resistencia. Y hay que tener un poco de escepticismo, porque a veces el mercado nos puede engañar con falsas rupturas o retrocesos.
Claro que también hay que usar la intuición. La apatía es tanta que es curioso que el precio no haya bajado más. De hecho, es posible que los vendedores se cansen pronto. Pero es probable que estén esperando una última capitulación. Y a partir de ahí un rebote es bastante factible.
¿Cómo saber cuándo se producirá la capitulación? Pues hay que estar atentos a las señales de pánico, de desesperación, de rendición. Hay que ver si el precio rompe el soporte de $24,500 (+/-), si el volumen se dispara, si el sentimiento se vuelve extremadamente negativo. Hay que tener en cuenta los factores externos, como las noticias, los eventos, las regulaciones. Y hay que tener un poco de coraje, porque a veces el mercado nos puede poner a prueba con falsas capitulaciones o rebotes.
En momentos como estos, hay que esperar a señales de entrada y salida. Y todo va a depender de lo que haga el precio. A este punto, hay dos alternativas básicas. Si el precio llega a 24,500 (+/-) y luego rebota con ánimo y volumen, ahí es donde entramos. Por el contrario, si rompe el soporte y se genera un breakout, el punto de entrada para los cortos es por debajo del soporte. Una vez que se compruebe que se ha roto gracias al volumen. De lo contrario, debemos esperar a que el precio llegue a los 22 o 20 mil dólares. Para entrar después del rebote.
¿Cómo saber cuándo se ha producido un rebote o un breakout? Pues hay que usar herramientas como las velas japonesas, el estocástico, y el volumen. Hay que observar si el precio cierra por encima o por debajo del soporte o la resistencia. Hay que ver si hay una confirmación en el siguiente período. Y hay que tener un poco de olfato, porque a veces el mercado nos puede confundir con falsos rebotes o breakouts.
Lo más sensato es esperar. Y luego reaccionar a las señales. Hay que esperar a las señales claras, a las oportunidades evidentes y a las ventajas indiscutibles. Porque el precio de Bitcoin puede ser esquivo. Hay que eliminar la emoción de la ecuación. Hay que ser como una máquina. Usamos los soportes, las resistencias y las medias como referencia. Y se actúa según el comportamiento del precio ante estos referentes. Debemos recordar que hacer eso no es garantía de éxito. Sin embargo, actuaríamos según las probabilidades. Debemos recordar que no hay una certeza. Entonces, hay gestionar el riesgo. Hay que operar con cobertura, stop-loss y prudencia.
Invertir nunca es simple, pero hay momentos más complicados que otros. Cuando la tendencia es obviamente alcista, vemos con mayor claridad que tenemos que comprar. Y cuando la tendencia es obviamente bajista, sabemos que hay que vender. Pero hay momentos en los que es mucho más difícil tener las cosas claras. En el momento de un cambio de tendencia, por ejemplo, durante el mínimo y durante el máximo del ciclo. Y durante los momentos de una larga tendencia lateral.
¿Qué hacer en esos casos? No tenemos más opción que hay la paciencia, el criterio y el sentido común. Hay que buscar las señales, las oportunidades y las ventajas. Y hay que aceptar la incertidumbre, el riesgo y la sorpresa.
Aclaración: La información y/u opiniones emitidas en este artículo no representan necesariamente los puntos de vista o la línea editorial de Cointelegraph. La información aquí expuesta no debe ser tomada como consejo financiero o recomendación de inversión. Toda inversión y movimiento comercial implican riesgos y es responsabilidad de cada persona hacer su debida investigación antes de tomar una decisión de inversión.
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Según es.cointelegraph.com
