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Las autoridades colombianas enviaron este sábado 20 de mayo a 50 soldados de las Fuerzas Especiales, estos se suman a los 100 uniformados que llegaron hace 14 días para apoyar el rescate de los cuatro menores desaparecido, cuando un avión en el que iba se estrelló en la selva al sur del país, cobrando la vida de tres adultos.
El avión Cessna 206, operado por la compañía Avianline Charter’s y en el que iban a bordo siete personas, desapareció de los radares el pasado 1 de mayo. La aeronave sufrió una aparente falla en el motor cuando volaba entre Araracuara, una remota localidad ubicada en la frontera entre los departamentos de Caquetá y Amazonas, y San José del Guaviare
En el accidente murieron tres personas adultas, mientras que, de acuerdo con los operativos de búsqueda los cuatro menores: Lesly Mucutuy, de 13 años; Soleiny Mucutuy, de 9; Tien Noriel Ronoque Mucutuy, de 4, y Cristin Neriman Ranoque Mucutuy, de 11 meses, se encontrarían con vida y los rescatistas creen que están caminando por la selva en busca de ayuda.
Por medio de un comunicado oficial, las Fuerzas Militares detallaron que las personas encargadas partieron desde el departamento de Antioquia hasta San José del Guaviare, donde se encuentra el Puesto de Mando Unificado (PMU) encargado de coordinar las labores de búsqueda de los niños.
“Estos Comandos serán insertados hoy mismo para apoyar la búsqueda de los cuatro menores desaparecidos desde el pasado primero de mayo”, señalaron las FF.MM.
En ese sentido, las Fuerzas Militares detallaron que, en la madrugada del sábado 20 de mayo, los uniformados realizaron desde helicópteros labores de perifoneo para orientar a los menores para que sepan que la búsqueda no se ha detenido.
La ‘Operación Esperanza’, como se ha denominado, representa un esfuerzo conjunto de las FF.MM. y otras instituciones para localizar y rescatar a los niños. A pesar de los desafíos presentados por la densa selva y las condiciones climáticas adversas, se mantienen los esfuerzos para encontrar a los menores y reunirlos con su familia.
Además, el papá de dos de los menores de edad está en la zona ayudando a la Fuerzas Militares en la búsqueda. El perímetro para encontrarlos se amplió.
El general Pedro Sánchez Suárez, comandante del Comando Conjunto de Operaciones Especiales de las Fuerzas Militares aseguró que: “estos comandos que son los más entrenados de Colombia son referente global de fuerzas especiales reforzarán el trabajo que se ha venido adelantado”.
El sitio donde ocurrió el accidente es una espesa y lluviosa zona que hace más difíciles las labores de búsqueda, allí más de 100 miembros de las Fuerzas Militares junto con perros de búsqueda y rastreo, indígenas locales apoyados por helicópteros están colaborando en las labores de rescate.
“Lo que hace más compleja la misión son las ventanas meteorológicas tan pequeñas que hay para el desarrollo de la misma. Aquí la meteorología puede estar buena en un momento y en 30 o 40 minutos, tormentas o sistemas de baja presión”, indicó el mayor Juan Esteban Valencia, orgánico del Ejército y piloto de helicóptero en la operación.
Esta semana el Ejército Nacional y la Aeronáutica Civil encontraron indicios que podrían pertenecer a los menores, como un refugio improvisado en una zona rural del caserío Palma Rosa del municipio de Solano, departamento de Caquetá construido con palos y ramas, tijeras, moñitas utilizadas para el cabello y restos de frutas que posiblemente hayan consumido.
Antes, en otro lugar, un canino Ulises que hace parte del equipo de búsqueda halló un biberón, que se presume fue utilizado para alimentar al bebé. La aeronave fue encontrada de cabeza, lo que indica que la tripulación pudo intentar posarse de emergencia sobre gigantescos árboles de raíces enormes.
Asimismo, encontraron nuevas huellas cerca de un riachuelo, que podrían ser de los cuatro niños desaparecidos.
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Según infobae.com
